...No podrás escapar de ellas, hasta que sientas su presencia junto a ti..."

La puerta se abría lentamente...Una joven observaba expectante para ver si detrás de la puerta aparecía una persona o tal vez algo sobrenatural, pero solo noto que el viento de la noche nublada había sido el causante de tal hecho. 

-Creo que me ore a dormir... ya es muy tarde...Estas palabras dijo la joven, ya que estaba despierta desde las 05:00 am y ya eran cerca de las 02:00 am. 

 De repente se escucha un sonido escalofriante proveniente de afuera, un grito desgarrador que lograba helarte la sangre 

 -Uhm... ¿Quién grito?... Tendré que ir a verificar afuera para ver si no le ha ocurrido nada a nadie...  La chica salio con su pijama y sus pantuflas para verificar lo sucedido en su patio delantero, pero no encontró nada, solo el viento de la noche fria le refresco el rostro y le causo escalofríos inminentes sobre su cuerpo.

Que frío.... No debí salir de casa....

Inmediatamente regreso a su cuarto y prendió la televisión para ver una película. Cuando escogió la película para ver, de manera espontánea se cortan las luces. Su casa quedo totalmente a oscuras... No había más que el brillo de sus globos oculares y la luz de la luna que iluminaba su patio.

-Creo que hoy no es mi día... tendré que tener cuidado al bajar las escaleras... 

 Bajaba cuidadosamente las escaleras sin temor alguno, hasta que siente un gemido sobre el lado izquierdo de su rostro.

 -...¿ Quién es...? 

Estaba muy temblorosa, no sabia quien podría estar en ese instante a su lado, ya que solo se encontraba ella sola en su hogar. Sabia que su padre no podía ser capaz de causarle tal broma ni tampoco su madre, así que intento seguir bajando las escaleras, sin darle importancia a ese gemido.Logro bajar de las escaleras sin problemas, salio afuera y observo el panorama en su vecindario y se dio cuenta que solo su casa no tenia energía eléctrica. 

 -Lo que ne faltaba...Ahora qué hago sin luz.... y para completar no tengo el número de la empresa de electricidad...

 En esas horas no se hallaba ningún vecino rondando por el vecindario solo perros callejeros revolviendo los basurales. 

 -Uhm... que mal... que mal... que mal... 

No podía comprender porque ese día le estaba causando tantos problemas, se sentó en la entrada junto a la puerta a esperar a sus padres... Los que no llegaban, esto le causaba temor, ella estaba sola jamás se quedo sola por un periodo prolongado. A pesar de que le encantaban las películas de terror creía que esas películas podían hacerse realidad. 

 -Tengo mucho miedo... podría ser que algo malo pasara en esta noche... no quiero estar sola en esta oscuridad... siento que alguièn me observa....

 El clima comenzó a tornarse cambiante se oían ruidos entre ellos algunos murciélagos cruzando por el lugar del hecho..  

-¿Qué eso que se esta acercando? creo... creo... creo... 

Una figura gris humo se estaba deslizando entre el aire silencial de la noche, una figura tal podía ser solo fantasma o un espectro buscando victimas a las cuales asustar... 

-¡No... tengo miedo! pero... ¿A dónde puedo huir...? se esta acercando a mi... pero no puedo correr el miedo se apoderado de mis sentidos y de mis movimientos... 

La figura grisácea se acercaba cada vez más a la joven que no podía levantarse del pasillo de la entrada de su puerta... solo observaba que dicha presencia se encontraba casi a su lado. 

-... (Totalmente perpleja). 

 ............

-¡Noooo! ¡no te me acerques!

 La figura se acerco a la chica y con una mirada borrosa logro activar a los estímulos vitales de la joven causándole taquicardia, logrando que las pupilas se dilataran y hasta incluso que temblara.

-...  No, no, no, no, ¡¡esos ruidos!! ¡¡¿ porqué oigo esas voces en mi cabeza?!! ¡¡Parecen agujas que me traspasan la piel!! no, no, no, no, no ¡¡No quiero oír esas voces!!  

La joven se presionaba la cabeza con sus miembros superiores tratando de eliminar los sonido sen su cabeza, producto de los pensamientos de la criatura, pero no lo conseguía, su mente estaba totalmente controlada por su temor, no podía controlar sus emociones. 

La noche seguía, las horas parecían no correr por primera vez, las agujas no se movían como lo hacían siempre, pareciese como si estas fueran testigos de lo que ocurría...  

-No, las quiero oír... ya aléjense de mi...  

-"...No podrás escapar de ellas, hasta que sientas su presencia junto a ti..." 

 -... ¡¡Ya déjame!! 

 -"...No podrás escapar de ellas, hasta que sientas su presencia junto a ti..."

-¡¡Ya...Dejàme... !!  

 La joven seguía gritando, pero nadie la podía oír, solo la brisa fresca y el ruido de las hojas en los arboles se hacian notar, el sonido de un grito se adueño del silencio y lo último que se pudo oír fue:

  -"...No podrás escapar de ellas, hasta que sientas su presencia junto a ti..."